El consumo de yerba mate en el mercado interno argentino cayó un 9,5% en los primeros nueve meses de 2024, según datos del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM). Entre enero y septiembre, la demanda local registró una baja de más de 18 millones de kilos en comparación con el mismo periodo de 2023, reflejando la caída del poder adquisitivo de los consumidores.
La reducción diaria se estima en unos 68 mil kilos, y en promedio cada persona consumió unos 404 gramos menos que el año pasado. Mientras tanto, las exportaciones tuvieron un repunte del 9%, alcanzando 2,6 millones de kilos adicionales. Se proyecta que el año podría cerrar con aproximadamente 42 millones de kilos de yerba exportados, impulsando la demanda en el mercado externo.
Además, se observó un cambio en las preferencias de compra, ya que los envases de medio kilo fueron los más elegidos por los consumidores, alcanzando el 56,53% de las ventas, frente al 55,53% del año anterior. En cambio, los paquetes de un kilo disminuyeron en popularidad.
Por otro lado, la cosecha del sector primario alcanzó cifras récord, con 968 millones de kilos de hoja verde recolectados hasta septiembre, debido a condiciones climáticas favorables y una mejoría en las lluvias. Sin embargo, la abundancia de oferta resultó en una baja de precios que, en algunos casos, descendieron por debajo de los niveles de 2023. Esta situación coloca a los productores en una posición compleja, ya que el contexto de sobreproducción y precios bajos afecta la rentabilidad y sostenibilidad del sector.