Un nuevo episodio de la feroz rivalidad entre Rosario Central y Newell's Old Boys sacudió la ciudad, con la aparición de un pasacalles provocador en la sede "leprosa". Presuntamente colocado por hinchas "Canallas", el mensaje aviva la polémica generada por la foto de niños de Newell's con Ignacio Malcorra, figura de Central.
La lona exhibía una frase contundente: “A$tore: con los chicos no. Solo querían una foto con Papá”. Este mensaje no solo ridiculiza al presidente de Newell’s, Ignacio Astore, sino que hace directa alusión al presunto castigo a seis niños de 9 años, quienes habrían sido apartados de la escuelita de fútbol tras la viralización de la imagen.
Aunque el club de Parque Independencia negó haber aplicado sanciones formales a los menores, diversas fuentes locales aseguran que la medida incluyó la suspensión de becas y actividades por tres meses, una acción interpretada por muchos como un castigo encubierto. Desde el entorno de Newell's, se argumenta que la decisión fue consensuada con las familias para "evitar situaciones de hostigamiento".
Este hecho vandálico reaviva un conflicto que se creía superado y generó preocupación en Rosario, donde la pasión futbolística a menudo cruza límites peligrosos. El entrenador Cristian “Ogro” Fabbiani salió en defensa de la dirigencia de Newell's, sugiriendo que el escándalo actual es más político que deportivo, en un año electoral para el club.
El pasacalles es un claro ejemplo de cómo una simple imagen puede convertirse en combustible para la creciente "grieta" entre los dos clubes más grandes de la ciudad. Esta situación no solo expone la intensa rivalidad rosarina, sino que también pone en alerta a los organismos de seguridad locales sobre hasta qué punto la pasión puede ganarle a la razón.
