En el marco del Día del Periodista, Javier Muñiz recordó en diálogo con Radio Facundo Quiroga sus inicios en la emisora, que marcaron el comienzo de su trayectoria en los medios de comunicación. Con emoción, el histórico productor y cronista de Resistencia rememoró cómo fue convocado para sumarse al equipo de Códigos en la mañana, un programa que se emitía desde Corrientes bajo la conducción de Natalio Aides. “Fue hace entre 18/20 años, y aunque a veces uno pierde la cuenta, fue una etapa inolvidable”, expresó.
Muñiz compartió que su llegada a la radio fue impulsada por Gustavo Vargas, cronista de exteriores en ese entonces, quien lo descubrió mientras él participaba como militante social en una actividad comunitaria. “Yo trabajaba en una organización comunitaria y reclamábamos por la gran cantidad de muertos que había en la Ruta 11. Gustavo me escuchó y me recomendó por mi forma de hablar y de plantear los temas”, relató. Ese gesto fue el punto de partida de una oportunidad que cambiaría su vida.
Tras algunas charlas con el productor y una breve etapa de prueba, fue incorporado al staff del programa. “Estuve dos meses a prueba y después ya me quedé. Ahí empezó mi carrera en Facundo Quiroga”, contó. Para Muñiz, el vínculo con la emisora fue mucho más que laboral: “Para mí la familia de Facundo Quiroga fue el elemento fundamental para que hoy pueda hacer lo que estoy haciendo. Fue lo más maravilloso que me pasó en la vida”.
A lo largo de la entrevista, el periodista se mostró agradecido con quienes lo acompañaron en esa etapa inicial. Mencionó a colegas y locutores de entonces, y reflexionó sobre el valor de no perder la memoria del camino recorrido: “Nunca se olviden de dónde salieron y jamás se olviden de la gente con la que aprendieron. Solamente se van a acordar de lo que aprendan cuando se recuerden a quién les enseñó”.
Con la calidez de quien no olvida sus raíces, Muñiz cerró el diálogo reafirmando su compromiso con el oficio: “Estoy enamorado de esa radio y ese amor no se pierde nunca, porque ese primer amor no se olvida. Desde ahí arrancó la vida”.
