La Unión Tranviarios Automotor (UTA) se bajó del paro general convocado por la CGT para este jueves 10 de abril, tras acatar la conciliación obligatoria dictada por la Secretaría de Trabajo de la Nación. De esta manera, el transporte público funcionará con normalidad durante la jornada de protesta.
La medida de conciliación tendrá un alcance de 15 días y busca destrabar el conflicto por mejoras salariales exigidas por los choferes. Mientras tanto, las negociaciones seguirán en curso entre el gremio y las autoridades laborales.
Pese a esta decisión, la Confederación General del Trabajo (CGT) ratificó que continuará con el paro general de 24 horas y la marcha de los jubilados prevista para el miércoles 9, en reclamo contra la política económica del gobierno de Javier Milei.
Será la tercera huelga convocada por la central sindical contra la gestión libertaria. “Nos movilizamos en defensa del salario, de los derechos de los jubilados y en contra del ajuste”, señalaron desde la conducción de la CGT.
