En la localidad de Las Breñas, se detectaron casos de rabia paresiante en animales, lo que desató la inmediata implementación del protocolo de control por parte del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA). En diálogo con Radio Facundo Quiroga, la coordinadora de Sanidad Animal del SENASA Chaco-Formosa, Ana Fragoso, explicó que la región es considerada endémica de esta enfermedad, que afecta principalmente a bovinos, equinos, porcinos, ovinos y caprinos. Destacó que este tipo de rabia, transmitida por murciélagos vampiros, es recurrente, aunque suele presentarse en ciclos. "La clave es actuar de manera preventiva y no alarmarse, ya que existen medidas eficaces para evitar que se propague", afirmó.
En cuanto a las medidas preventivas, detalló que el control de la población de murciélagos vampiros es esencial. Esto se logra mediante la denuncia de posibles refugios donde estos animales puedan habitar, como pozos abandonados, árboles o tapera, para que profesionales del SENASA realicen el tratamiento adecuado. "Lo importante es que los productores se comuniquen con nosotros, ya que ellos conocen bien la zona y pueden identificar posibles focos", explicó. A pesar de la preocupación general, la vacunación y las acciones rápidas ayudan a controlar el brote y a evitar mayores riesgos.
La vacunación, según Fragoso, es uno de los pilares en la prevención de la rabia paresiante. "Es importante que los animales estén vacunados, y que se revacunen 20 a 30 días después de la primera dosis. La revacunación anual es clave para mantener la inmunidad", aseguró. Si bien la vacuna no es obligatoria en todos los casos, en situaciones como la actual, cuando ya se ha detectado un brote, la vacunación se convierte en una medida obligatoria en un radio de 10 km alrededor del foco de infección.
Por otro lado, la sintomatología de los animales afectados por la rabia paresiante incluye signos neurológicos como dificultad para caminar, aislamiento y decaimiento general. "Si un animal presenta estos síntomas, es fundamental que el productor no lo manipule y lo comunique inmediatamente a un veterinario", aconsejó. Los animales infectados por esta enfermedad pueden volverse agresivos y, en algunos casos, la enfermedad puede ser transmitida a los seres humanos a través del contacto con los animales enfermos.
Finalmente, la coordinadora subrayó la importancia de evitar acciones precipitadas como matar murciélagos en un intento por eliminar la amenaza. "Los murciélagos tienen un papel fundamental en el ecosistema, por lo que no se debe recurrir a su exterminio. En su lugar, se debe contactar a los profesionales que están capacitados para manejar estas situaciones de manera adecuada", concluyó.
