A 255 años del natalicio de Manuel Belgrano, el profesor Oscar Bulacio, presidente del Instituto Belgraniano de Resistencia, lamentó en diálogo con Radio Facundo Quiroga el desconocimiento generalizado sobre la figura del prócer. “Hoy los chicos no saben quién fue”, afirmó con preocupación, y aseguró que en las escuelas se enseña poco y mal sobre uno de los padres fundadores de la patria. “Hay que volver a esas enseñanzas fundacionales, al ideario de libertad, autonomía y soberanía que Belgrano defendió”, insistió con firmeza.
Bulacio repasó aspectos biográficos esenciales del prócer, destacando su formación académica y su sólida fe católica. “Nació el 3 de junio de 1770, hijo de un comerciante italiano y una madre criolla, en el barrio de Montserrat. Estudió en el Colegio San Carlos y luego en Europa, donde se empapó de las ideas de la Ilustración y la Revolución Francesa”, explicó. Según relató, Belgrano fue un “erudito autorizado por el Vaticano para leer libros prohibidos”, lo que da cuenta de su profundidad intelectual.
Para el profesor, el perfil de Belgrano como outsider es ineludible. “Era abogado, economista, funcionario del consulado, pero no militar. Y sin embargo, encabezó campañas claves para la independencia y se convirtió en jefe del Ejército del Norte”, afirmó, y agregó: “Era un hombre todoterreno, que tomó las armas por necesidad y por convicción revolucionaria”. Además, recordó que Belgrano fue quien propuso que un descendiente de los Incas gobernara el país, una idea que fue rápidamente descartada por el conservadurismo de la época.
La figura de Belgrano también carga con una paradoja histórica: murió en la pobreza, a pesar de provenir de una familia acomodada. “Su padre fue injustamente acusado, le confiscaron los bienes, y eso afectó a toda la familia. Después de la Revolución, Belgrano se entregó por completo a la causa. Nunca buscó enriquecerse”, contó Bulacio. “Inclusive el dinero que se le otorgó como premio por las victorias de Tucumán y Salta lo donó para la creación de escuelas. Ese era su compromiso con la patria”, añadió.
Finalmente, el titular lamentó que hoy muchos desconocen la dimensión real de Belgrano. “No fue solo el creador de la bandera. Fue un pensador adelantado a su tiempo, un revolucionario que entendía que la independencia no era solo política, sino también económica y cultural”, aseguró. Y concluyó: “Recordarlo y enseñarlo bien en las escuelas es una forma de defender los valores en los que se fundó nuestra nación”.