En un momento de tensión por la posible prohibición de TikTok en Estados Unidos, la ley federal que la aplicación pide paralizar, le otorgó a ByteDance nueve meses para encontrar un inversor de un país que no se considere como "adversario", para vender sus operaciones en la nación norteamericana.
La fecha límite coincide con el último día de Joe Biden como mandatario, para que luego Donald Trump, el presidente electo, tome posesión de la Casa Blanca y revise el caso junto a la nueva Administración y eventualmente el Tribunal Supremo.
El futuro de la aplicación
Específicamente se pide que Joe Biden no pueda aplicar la ley, la cuál aprobó junto a congresistas de los partidos Demócrata y Republicano por temor a que el Gobierno chino obtenga información de los usuarios y los manipule, hasta que el Tribunal Supremo revise el caso.
"No existe una amenaza inminente para la seguridad nacional, ya que el propio Congreso retrasó la fecha de entrada en vigor de la ley", anunció TikTok en su escrito a la Corte, y agregó que "la ley afirma que China podría llevar a cabo conductas perjudiciales a través de TikTok, no que lo esté haciendo o lo vaya a hacer".
Por otro lado, Donald Trump intentó prohibir la plataforma durante su primer mandato (2017-2021) y pero luego anunció durante su campaña electoral, que de ser el ganador de las elecciones, "salvaría TikTok en Estados Unidos".
Sin embargo, desde que se consagró ganador de las elecciones presidenciales del pasado noviembre, no volvió a pronunciarse al respecto sobre el tema y los usuarios mantienen la expectativa de que la aplicación pueda continuar funcionando en el país.