Luego de semanas de incertidumbre y preocupación, Thiago Medina fue dado de alta del Hospital Mariano y Luciano de la Vega, en Moreno, donde permaneció internado 27 días tras un grave accidente de moto ocurrido el 12 de septiembre. A los 22 años, el ex Gran Hermano logró una recuperación que muchos consideraban difícil, gracias a su evolución constante y al acompañamiento médico y familiar.
La salida del hospital fue emotiva: entre aplausos, cámaras y familiares que lo recibieron con lágrimas, Thiago caminó hacia la puerta principal con ayuda de su hermana, Camila Deniz. “Ya está, me estoy yendo a casa. Soy libre”, dijo sonriente, aún con la voz débil, pero con la determinación de quien superó una etapa dura.
En sus primeras palabras públicas tras el alta, el joven mostró su costado más íntimo: “Cuando me desperté lo primero que pensé fue en tomar agua y cuando recibí el alta, en ver a mis hijas”, confesó. Su prioridad, explicó, está puesta en volver a abrazar a Laia y Aimé, las gemelas que lo acompañaron desde la distancia durante su recuperación.
Sobre los rumores que circularon en las últimas semanas, Thiago aclaró que no hubo propuestas de matrimonio ni planes inmediatos con su expareja y madre de las niñas, Daniela Celis. “No, nunca lo dije. Si se da más adelante, se va a ver en las redes. Pero bueno, estamos acá”, señaló con calma, enfocándose en la recuperación física y emocional.
El joven agradeció al personal de salud que lo atendió durante su internación y a todos los que le enviaron mensajes de apoyo. “Estuvieron atentos a todo lo que necesité”, expresó. “Quiero ver a mis hijas y estar con ellas, eso es lo único que me importa ahora”, repitió, marcando así el comienzo de una nueva etapa: la de volver a su casa, dejar atrás el hospital y reencontrarse con lo más importante.





