Un reciente informe de la Procuraduría de Violencia Institucional revela un aumento significativo en la población carcelaria federal en Argentina. En 2024, el número de presos creció un 3,4% a nivel nacional, marcando el mayor incremento en los últimos cinco años. Este aumento se traduce en 385 detenidos más, alcanzando un total de 11.696 personas encarceladas en el Servicio Penitenciario Federal (SPF).
En la provincia de Chaco, la situación es aún más preocupante. Las dos prisiones federales, la U7 de Resistencia y la U11 de Sáenz Peña, experimentaron un crecimiento de reclusos superior al promedio nacional. La U7 aumentó su población en un 3,68% (de 380 a 394), mientras que la U11 lo hizo en un 6,51% (de 169 a 180). En conjunto, ambas cárceles pasaron de albergar 549 a 574 presos, lo que representa un aumento del 4,55%, superando el promedio nacional.
Es importante destacar que la sobrepoblación carcelaria es un problema creciente. El informe señala que en 2024 hubo un 6,3% de sobrepoblación, lo que equivale a 694 personas detenidas por encima de la capacidad de alojamiento informada por el SPF. En cuanto a la situación judicial, el 59,4% de la población penal cumple condena firme, mientras que el 40,6% está en prisión preventiva.
Además, el estudio señala que, de la población carcelaria federal, 1884 son ciudadanos extranjeros (16,1%), aunque esta cifra representa una ligera disminución anual del 0,1%. En la provincia de Chaco, la U7 alberga a 36 personas extranjeras y la U11 a 16. El número de mujeres y personas travesti-trans detenidas también aumentó, en un 7% anual.