Finalmente, Gustavo Nadir Almirón Molina, de 27 años, el principal sospechoso del asesinato de Aníbal Leiva, se entregó a las autoridades policiales. Almirón Molina, acusado de supuesto homicidio, era intensamente buscado tras la muerte de Leiva, quien perdió la vida el pasado 12 de abril en el barrio Villa Río Negro a causa de un disparo en la cabeza. Su detención se concretó cuando se presentó acompañado por su abogado defensor, el Dr. Marcos Fabro.
La investigación reveló que la víctima habría sido entregada en un domicilio, donde un joven de 18 años fue quien presuntamente coordinó la llegada de Leiva al lugar del crimen en complicidad con Almirón Molina. El propietario de la vivienda, donde se encontró el cuerpo sin vida, y el hijo fueron detenidos por su presunta participación en el hecho.
En el marco de las investigaciones, también se secuestraron los teléfonos celulares de la pareja de Almirón Molina, con el objetivo de profundizar en el análisis de las comunicaciones previas al homicidio. Al momento de su detención, Almirón Molina vestía ropas que fueron incautadas como evidencia para la causa.
Por disposición del magistrado interviniente, se notificó la aprehensión de Almirón Molina y se aguarda la intervención del Gabinete Científico del Poder Judicial para la realización de pruebas periciales, entre ellas el dermotest, que podría aportar información crucial sobre su posible vinculación con el disparo fatal. El caso continúa bajo investigación para esclarecer por completo los detalles del crimen.
