Este viernes a las 16, el Indec dará a conocer la inflación de marzo, en un contexto de fuerte expectativa por el nuevo acuerdo con el FMI y marcada volatilidad en los mercados financieros. Las proyecciones privadas coinciden en que el índice de precios al consumidor (IPC) marcará una suba respecto al 2,4% registrado en febrero, empujado por el alza de alimentos, bebidas y el comienzo del ciclo lectivo.
Según el IPC de la Ciudad de Buenos Aires, la inflación porteña fue del 3,2% en marzo, con un fuerte impacto del rubro alimentos y bebidas, que escaló un 4,7%. A nivel nacional, los analistas del Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central corrigieron sus pronósticos al alza y prevén una inflación del 2,6% para el mes.
Consultoras como Analytica estimaron una suba del 2,5% para el Gran Buenos Aires, destacando incrementos del 13,6% en verduras y del 4% en carnes. C&T, por su parte, calculó una inflación del 2,7% en esa misma región, donde los alimentos y bebidas treparon un 5,4% en promedio.
EcoGo también registró un 2,7% y señaló que, a pesar del control sobre las tarifas y un crawling peg moderado, el índice no logra perforar la barrera del 2%. Equilibra coincidió con un 2,6% de suba y adjudicó la presión inflacionaria a aumentos estacionales en verduras e indumentaria. Por su parte, la medición más alta fue la de Orlando J. Ferreres & Asociados, que proyectó un 2,9%, con fuertes alzas en educación, alimentos y ropa.
La clave para los precios en abril estará en la evolución del dólar, que sigue siendo el principal factor de presión ante un escenario financiero incierto y negociaciones en curso con el FMI por un nuevo programa de financiamiento de USD 20.000 millones.