La madre de la niña asesinada la semana pasada en Quitilipi transita un embarazo de cuatro meses, por ello el Juzgado de Garantías falló a favor del Habeas Corpus presentado por la defensa para ser trasladada a Resistencia para un alojamiento propio de su estado.
El Servicio Penitenciario Provincial para las mujeres de Resistencia tendrá el aval de elegir el lugar de destino según la disponibilidad que disponga, aunque por el momento se le otorgó un alojamiento provisorio en un lugar acondicionado especialmente para mujeres embarazadas.
La acción constitucional que tutela la libertad personal, fue pedida luego de que la joven de 20 años fuera atacada a golpes por otras reclusas en la celda de Sáenz Peña donde se encontraba detenida en la División Familiar y de Género.
Tras lo sucedido, el fiscal Cristian Arana dispuso su inminente cambio a la Comisaría de Machagai. Luego, el Defensor Oficial examinó que el lugar no reunía las condiciones necesarias y seguras de alojamiento para la mujer con un incipiente embarazo, por lo tanto, se estableció medidas judiciales para el traslado a Resistencia, y que fueron aceptadas parcialmente anoche en una audiencia.
Asimismo, la autopsia de la pequeña asesinada la semana pasada había descartado signos de abuso sexual y determinado la causa de muerte como “paro cardiorrespiratorio por sepsis generalizada”. Sin embargo, también reveló que la niña tenía introducido en su cuerpo dos agujas de aproximadamente 10 centímetros a la altura del pulmón y que una de esas agujas le había provocado una infección muy grande. Actualmente, tanto la madre como el padrastro se encuentran imputados.
