El Senado de la Nación asestó un duro golpe a la política de ajuste del gobierno de Javier Milei al convertir en ley un paquete de medidas que el Presidente ya confirmó que vetará. La oposición en la Cámara Alta logró avanzar con iniciativas clave, a pesar de las fuertes críticas del mandatario, quien comparó la votación con un "puñal" y advirtió que llevará el tema a la Justicia si el veto se cae. Milei consideró lo ocurrido como un "acto de desesperación" de quienes saben que "la libertad arrasa" en octubre.
Una de las leyes sancionadas, que había obtenido media sanción en Diputados, implica un aumento real del 7,2% para todos los haberes y pensiones, excluyendo regímenes especiales. Además, eleva el bono de $70.000 a $110.000, y establece su actualización automática por inflación. La principal objeción oficialista radica en que este bono se convierte en un derecho permanente.
En una triple victoria opositora, también se restituyó la moratoria previsional por dos años. Este mecanismo permitirá a quienes no hayan completado los 30 años de aportes requeridos adquirir los períodos faltantes para acceder a la jubilación mínima.
El paquete legislativo se completó con la declaración de emergencia en discapacidad hasta el 31 de diciembre de 2026, una medida aprobada de forma unánime. El oficialismo se mostró sin capacidad de defensa en el recinto. La Casa Rosada, por su parte, buscó atribuir la derrota legislativa a la vicepresidenta Victoria Villarruel, a quien el Jefe de Estado incluso tildó de traidora por su comportamiento en el Senado.
Ante la derrota legislativa, el presidente Milei reiteró su postura: "Vamos a vetar. Aún si se dieran las circunstancias, que no creo, que el veto se caiga, lo vamos a judicializar". El mandatario aseguró que, incluso en el peor de los casos, el daño que podrían causar sería mínimo y que su política de superávit fiscal es permanente.
