Un cruce encendido entre el astro argentino Lionel Messi y el delantero uruguayo Matías Cóccaro del Atlas de México capturó la atención durante el debut del Inter Miami en la Leagues Cup. El episodio ocurrió al final del partido que el Inter Miami ganó 2-1 con un agónico gol de Marcelo Weigandt. Tras el tanto que selló la victoria, Messi celebró eufóricamente el gol "delante" de Cóccaro. Sin embargo, lo más destacado fue la actitud de Messi post-partido: el capitán argentino le pidió disculpas al jugador del Atlas, un gesto que el propio Cóccaro resaltó como muestra de la calidad humana de Messi.
Cóccaro, quien ingresó en el segundo tiempo, explicó que el enfrentamiento verbal surgió después de que Atlas lograra el empate parcial. El uruguayo buscó motivar a sus compañeros, diciéndoles que fueran a buscar el segundo gol, y Messi "se lo tomó mal". Las imágenes viralizadas mostraron a un Messi muy enojado, gritándole a Cóccaro: "¡Tomá! Andá a buscarlo, andá a buscarlo al segundo ahora".
A pesar de la intensidad en el campo, el delantero de Atlas de 27 años aseguró que la situación no escaló y que tuvo un desenlace positivo. Cóccaro destacó que, tras el partido, se dieron un abrazo y que Messi, "sin necesidad", se acercó a pedirle disculpas, lo que "lo hace más grande todavía". Como un gesto de buena voluntad, Messi incluso le obsequió su camiseta número 10 del Inter Miami, dejando a Cóccaro "muy tranquilo con la imagen" que le dejó el campeón del mundo.
Cóccaro expresó su admiración por Messi, de quien dijo que "ganó todo y con 38 años está impecable", y que su reacción en el campo solo demuestra que "el loco quiere seguir ganando". El uruguayo afirmó: "No le puedo decir nada, ¿qué le voy a decir? Es el mejor de la historia. Le dije, con él me callo la boca. Y con Suárez, que es mi ídolo". Esta mentalidad ganadora de Messi también se reflejó en sus propias declaraciones post-partido, donde valoró el buen inicio de su equipo y la importancia de "sumar más que los demás" en la Leagues Cup.
Esta eventualidad subraya la pasión y el espíritu competitivo que rodea a figuras de la talla de Messi y Luis Suárez en el campo. A pesar de la frustración por la derrota en la última jugada, Cóccaro valoró el desempeño de su equipo contra rivales de esa envergadura, reconociendo que "te ganan por la genialidad y la calidad que tienen". La anécdota, que comenzó con un grito de gol eufórico, terminó consolidando el respeto mutuo entre dos profesionales del fútbol.






