La joven psicóloga y sexóloga Daiana Zaragoza Seratti visitó los estudios de Radio Facundo Quiroga para abordar un tema que, lamentablemente, suele ser invisibilizado o banalizado en los medios: la sexualidad en la tercera edad. Durante su charla, compartió valiosas reflexiones sobre la menopausia y la andropausia, destacando la importancia de visibilizar estas realidades y generar un diálogo abierto. "Realmente hay desinformación y hay sectores etarios, por ejemplo, que quedan completamente olvidados", afirmó, subrayando la necesidad de romper tabúes y prejuicios en torno a la sexualidad en la vejez.
Uno de los puntos centrales de la conversación fue la menopausia, un proceso que, según la experta, implica una "revolución tanto biológica como psicológica como social". Más allá del cese de la menstruación, la menopausia conlleva una disminución de los estrógenos, lo que puede provocar síntomas anímicos como ansiedad y depresión, alteraciones del sueño, y cambios físicos como la sequedad y atrofia vaginal, que pueden generar dolor durante las relaciones sexuales y una disminución del deseo. La psicóloga subrayó el impacto social de este proceso, especialmente cuando el entorno no logra empatizar: "Es terrible porque a veces el sentir que nadie empatiza con tu situación es terrible y te deja en una situación de soledad, de incomprensión".
En cuanto a la andropausia, la sexóloga explicó que, a diferencia de la menopausia, no presenta un corte tan marcado en los hombres, sino que es un proceso más progresivo de disminución de testosterona. Esto puede manifestarse con fatiga, disminución de la masa muscular, aumento de la grasa corporal y una caída de la energía vital, síntomas que a menudo se confunden con depresión. Seratti enfatizó la necesidad de un diagnóstico diferencial preciso: "A veces dicen 'te pegó el viejazo, que ahora te replanteas tu vida, no sabes qué hacer.' Bueno, no. Es un proceso biológico que se puso en marcha y hay que saber acompañar".
La profesional hizo hincapié en la importancia de un abordaje integral de la sexualidad, que incluya tanto el aspecto biológico como el psicológico y social. Resaltó la necesidad de mantener un estilo de vida saludable, con ejercicio regular, alimentación balanceada y un buen descanso, ya que "nuestros hábitos son muy importantes más de lo que pensamos". Además, abordó la renuencia de los hombres a buscar ayuda profesional: "Yo tengo el 80% de pacientes mujeres y el 20% de varones. Esto ya te dice algo". Atribuyó esta disparidad a una educación que a menudo les enseña a desconectarse de sus emociones y cuerpos, fomentando una "cultura del aguante" que retrasa la consulta médica.
Finalmente, la psicóloga animó a las personas a no postergar la consulta sexológica, ya sea de forma individual o en pareja. "No hace falta tener grandes problemas para pedir ir una consulta y darte la oportunidad de sacarte ciertas dudas", señaló.