De ahora en más, todo va a ser peor. Algo se quebró en Israel tras la brutal irrupción de Hamas en las poblaciones cercanas al militarizado vallado fronterizo con la Franja de Gaza. No solo quedó condicionado el premier Benjamin Netanyahu, cuyo poder estará cementado por un futuro gobierno de unidad que extendería su supervivencia en el poder para evitar una mayor muestra de debilidad ante el enemigo. También llevó al pueblo israelí a una nueva realidad devastadora: su país es vulnerable. No es un feudo inexpugnable contra el terrorismo.
Ahora, todo es posible. Gaza está bajo bombardeo y asedio total. No entran alimentos ni combustibles y se ha cortado el suministro eléctrico. También ahí mueren ahora civiles inocentes, entre ellos 78 niños, según Save The Children. Grupos armados se infiltran desde el Líbano, donde Israel bombardea la frontera contra posiciones del Hezbolá, el gran socio de Irán. Hamas se agazapa, pero sigue lanzando misiles contra Jerusalén y muestra al mundo que el terror es su gran aliado. No hay negociación posible.
"Vivimos una angustia latente": periodista chaqueño reporta desde Israel
En este contexto de guerra, una eventual ofensiva terrestre del ejército israelí sobre Gaza es hoy un escenario más que probable. Allí están retenidos más de un centenar de rehenes. El futuro, a ambos lados del vallado de una frontera siempre en disputa, puede ser una pesadilla de la que será difícil despertar.
“La sensación es que la magnitud de los ataques y las respuestas israelíes anuncian que el conflicto va a seguir recrudeciendo y lamentablemente vamos a ver que la mayoría de las víctimas van a ser civiles”, dijo el analista internacional Paulo Botta, especializado en Medio Oriente e Irán.
CAMBIAR PARA SIEMPRE
Netanyahu prometió este lunes que la respuesta de Israel al ataque de Hamás “cambiará Medio Oriente” para siempre.
”Sé que han experimentado momentos terribles. Lo que experimentará Hamás será duro y terrible. Estamos ya en medio de la batalla y solo acabamos de empezar”, dijo en una reunión con políticos israelíes del sur del país. ”La nación hará todo lo que está en sus manos para ayudarlos. Les pido ser fuertes, porque vamos a cambiar Medio Oriente”, indicó.