Las autoridades de Río Negro confirmaron que el incendio forestal en El Bolsón, que destruyó más de 120 viviendas y consumió 2.800 hectáreas, fue intencional. El gobernador Alberto Weretilneck aseguró que se trató de un atentado contra la comunidad y prometió "llegar hasta las últimas consecuencias" para dar con los responsables.
La Policía identificó a los sospechosos, quienes lograron huir en una camioneta. Se reforzaron los operativos en la región para dar con su paradero, mientras el fuego sigue activo y amenaza nuevas áreas protegidas. Además de la pérdida de viviendas y recursos naturales, una persona falleció a causa del siniestro.
En respuesta a la emergencia, Weretilneck declaró el estado de “Emergencia y Desastre Agropecuario” por un año, eximiendo del pago de impuestos a los afectados. También viajará a Buenos Aires para gestionar apoyo nacional. Por su parte, la provincia recibió refuerzos de brigadistas y efectivos policiales de distintas localidades para intensificar el combate contra las llamas.
