Una mujer perdió la vida en Corrientes tras intentar apagar un incendio en la estancia donde trabajaba su padre. La víctima, se encontraba colaborando junto a su pareja para sofocar las llamas en la localidad de Mariano Loza, a 41 kilómetros de Curuzú Cuatiá. Desafortunadamente, inhaló monóxido de carbono y sufrió quemaduras graves en el 70 por ciento de su cuerpo.
La mujer fue trasladada inicialmente a un centro de salud local y posteriormente derivada al hospital de Mercedes, donde falleció a causa de la gravedad de sus lesiones. La joven era docente y fue identificada como Cindia Mendoza, de 30 años, directora de la Escuela 919 de Alem Cué, de La Cruz.
El fuego, que comenzó el lunes, ya consumió más de 7.500 hectáreas. Este trágico suceso resalta los peligros que enfrentan las personas en zonas rurales durante incendios forestales.
Este lamentable incidente se suma a otras tragedias recientes causadas por incendios en el país. En Río Negro, un hombre murió en El Bolsón tras regresar a una zona de incendio para alimentar a sus perros. La situación pone de manifiesto la vulnerabilidad de las comunidades rurales ante los incendios y la necesidad de medidas preventivas y de respuesta efectivas.