La última gala de eliminación de Gran Hermano dejó a Luciana Martínez fuera del reality, tras un enfrentamiento final contra Chiara Mancuso. Con el 51,2% de los votos en su contra, la jugadora se convirtió en la nueva eliminada y se despidió entre abrazos y emoción.
La noche estuvo cargada de tensión, con una placa compuesta por ocho nominados. Uno a uno, los participantes fueron salvados hasta que el cara a cara quedó entre Luciana y Chiara. La salida de Luciana impactó especialmente a El Tridente, el grupo que integraba junto a Tato Algorta y Luz Tito.
Antes de abandonar la casa, dejó un emotivo mensaje: “Entró una niña asustada y se va una mujer llena de vida y de sueños. Cuando se cierra una puerta, se abre un universo entero. Gracias a todos, los voy a atesorar mucho”.
El juego de Furia Scaglione fue clave en este resultado. Como líder de la semana, usó su fulminante contra Chiara, lo que definió la placa y terminó inclinando la balanza en la votación del público.
Luciana protagonizó varias polémicas en su paso por la casa, especialmente con Bati Larrivey, quien la acusó de cruzar límites de convivencia. Ahora, ya fuera del juego, la exjugadora se prepara para analizar su participación en los próximos programas.
