Un escandaloso hecho en Mar del Plata reavivó el debate sobre la confianza en las instituciones encargadas de protegernos. Una oficial de la Policía Bonaerense y un funcionario de la Justicia porteña fueron detenidos cuando intentaban ingresar a una fiesta electrónica con pastillas de éxtasis y tusi, evidenciando la alarmante realidad de que quienes deben hacer cumplir la ley pueden ser quienes la vulneran.

El hallazgo se produjo tras una requisa en la que el perro antidrogas “Zidane” detectó más sustancias ocultas en el auto de los implicados, presumiblemente destinadas a la venta dentro del evento. Ambos fueron identificados y enfrentan investigaciones judiciales, mientras la oficial fue apartada de su cargo por Asuntos Internos.

Entre los elementos incautados destacaron pastillas con diseños de marcas y figuras populares, demostrando la sofisticación de las redes de narcotráfico. También se decomisaron celulares y $500.000, lo que sugiere una operación más amplia de lo que parecía.