El vecino Manuel Gregorio Gómez, padre del inspector de tránsito baleado en el centro comercial de Quitilipi, criticó duramente el accionar policial tras haber capturado al agresor a una semana del incidente. Gómez, también conocido como "Goyo", declaró que en Quitilipi se está viviendo una "impunidad bárbara".
El incidente tuvo lugar en la calle Tucumán entre Córdoba y San Martín, un sector comercial muy concurrido y en hora pico. El agente municipal, de 24 años, fue atacado sin mediar palabras por un sujeto que circulaba en motocicleta, quien le efectuó un disparo en la pantorrilla de la pierna derecha. El agresor, ya fue identificado y dichas acciones quedaron registradas en las cámaras de seguridad.
Gómez lamentó la minimización del suceso en algunos medios, que intentan presentarlo como un "asunto de polleras" o "pelea entre novios". El padre del inspector sentenció que el problema es de toda la sociedad, ya que "un tipo sacó una pistola en pleno centro, a plena mañana, delante de todos y tiró cuatro tiros". Recordó que dos tiros fueron dirigidos al pecho del joven, pero no salieron, y cuestionó qué hubiera pasado "¿Y si le hubiera pegado a otro inocente?".
Finalmente, Gómez apuntó a las falencias en los controles y procedimientos, señalando que el propio intendente Lovey encontró al encargado del Centro de Monitoreo "jugando con el teléfono". Concluyó su reclamo mencionando otros incidentes, como el accidente del hermano del gobernador y el atropello de un empleado municipal, y afirmó que "todas las cosas están quedando en la nada".
Un hombre identificado por sus iniciales D. G. fue detenido el 17 de diciembre de 2025, acusado de haber baleado a un inspector de Tránsito Municipal de Quitilipi. El ataque ocurrió hace una semana a plena mañana, mientras el agente de 24 años, cumplía funciones en un operativo de control vehicular en las calles Tucumán y Córdoba. El agresor es señalado como el autor del ataque armado que dejó a la víctima con una herida de arma de fuego en la pierna derecha, con lesión ósea en el peroné.
La detención fue concretada por efectivos del Departamento de Investigaciones Complejas Interior en el barrio Tiro Federal de Sáenz Peña. La víctima había declarado que el ataque se originó por cuestiones personales relacionadas con la pareja del agresor. La investigación, a cargo del fiscal Marcelo Fabián Soto, incluyó el análisis de material fílmico que permitió reconstruir el recorrido del sospechoso, quien habría intentado evadir a la Justicia cambiando su vestimenta. La causa está caratulada como "supuestas lesiones con arma de fuego".
