A casi tres semanas del inicio del incendio en el Parque Nacional Nahuel Huapi, las intensas ráfagas de viento continúan dificultando las tareas de los brigadistas, especialmente en la zona de Los Manzanos. El domingo se registraron ráfagas superiores a los 50 km/h, lo que provocó nuevas columnas de humo, afectando áreas como Cerro Colorado y Cerro Bastión, una zona que previamente no había sido alcanzada por las llamas.
El ingreso de un frente frío, acompañado de fuertes vientos, generó un aumento en la intensidad del fuego, y se prevé que el humo se desplace hacia el Lago Steffen y El Manso, siendo visible desde puntos alejados. A pesar de ello, las autoridades aseguran que el fuego no avanza hacia el valle de El Manso gracias a las tareas preventivas realizadas por el Comité de Emergencia (COE), que también monitorea el comportamiento del incendio en la zona de Cascada de los Alerces.
El perímetro afectado por el fuego ya supera las 3.500 hectáreas, y las autoridades esperan condiciones climáticas más favorables para poder utilizar medios aéreos y obtener una evaluación más precisa del estado del incendio. Por seguridad, el acceso a la zona desde Los Rápidos a Circuito Cascada los Alerces está restringido, permitiéndose solo el paso de vehículos oficiales y de residentes.
Desde el inicio del fuego el 27 de diciembre, las llamas avanzan con rapidez debido a la sequedad del terreno y las condiciones climáticas adversas. El Ejército Argentino ha desplegado más de 150 efectivos, incluyendo brigadistas y personal de apoyo, mientras que también se ha enviado un helicóptero Bell con seis tripulantes para asistir en la lucha contra el fuego.
Recientemente, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, y el presidente de Parques Nacionales, Cristian Larsen, visitaron la zona afectada para recibir un informe detallado sobre el progreso de las tareas operativas y observar de cerca la magnitud del incendio.