Cada 27 de marzo se celebra el Día Mundial del Teatro, una fecha establecida en 1961 por el Instituto Internacional del Teatro (ITI) para destacar el valor de las artes escénicas y su impacto en la sociedad. Desde entonces, esta jornada ha servido para reflexionar sobre el teatro como una herramienta de expresión, memoria y cambio social.
El origen de la conmemoración está ligado a la diversidad escénica y al intercambio cultural. La fecha coincide con la inauguración del “Teatro de las Naciones” en París, un evento internacional que reunía producciones teatrales de todo el mundo, evidenciando el teatro como un lenguaje universal que trasciende fronteras.
En 2025, los festejos incluirán eventos en distintos países. En España, el rey Felipe VI encabezará la apertura del renovado Museo Nacional de Artes Escénicas en Almagro. En América Latina, el Gran Teatro Nacional de Perú presentará “La sonata de Odiseo”, una innovadora puesta en escena con Lengua de Señas Peruana para promover la inclusión.
Desde la Antigua Grecia hasta la actualidad, el teatro ha sido un reflejo de la humanidad, una ventana a la condición social y un espacio de transformación. Este día no solo celebra la belleza del arte escénico, sino que rinde tributo a quienes lo hacen posible: dramaturgos, actores, directores y el público que mantiene viva su esencia.