Cada 25 de junio se celebra en Argentina el Día del Psicólogo Social, una efeméride que busca reconocer la labor de quienes se dedican a promover el bienestar colectivo desde la salud mental. Esta fecha no es casual: conmemora el nacimiento de Enrique Pichón Riviere, figura central en el desarrollo de esta disciplina en el país.
Pichón Riviere nació en Suiza el 25 de junio de 1907 y se radicó desde pequeño en Argentina, donde se convirtió en un referente clave en el campo de la psiquiatría, el psicoanálisis y, especialmente, la psicología social. Fue el creador de la teoría del grupo operativo, un aporte fundamental para el abordaje de los vínculos y las dinámicas sociales desde una perspectiva transformadora.
Además de su rol como teórico, Pichón fue cofundador de la Asociación Psicoanalítica Argentina (APA) en 1940 y en los años 50 impulsó la creación de la Primera Escuela Privada de Psicología Social y del Instituto Argentino de Estudios Sociales (IADES), espacios que aún hoy inspiran a nuevas generaciones de profesionales.
La psicología social se ocupa del estudio del comportamiento humano en relación con su entorno. Examina cómo las personas piensan, sienten y actúan bajo la influencia de otros individuos, grupos o estructuras sociales. Así, el psicólogo social trabaja con problemáticas comunitarias, vínculos interpersonales, desarrollo emocional y construcción de la identidad en contextos colectivos.
Más allá del reconocimiento profesional, el Día del Psicólogo Social invita a reflexionar sobre la importancia de construir comunidades más saludables desde lo psíquico y lo social, reafirmando el valor de esta disciplina como herramienta de transformación social.