En un hecho inédito desde la creación del fuero contra el narcotráfico, la justicia del Chaco entregó a la Policía un inmueble que funcionaba como búnker de venta de estupefacientes. Esta medida sin precedentes se realizó en calidad de depositario judicial provisorio.
La decisión fue tomada por la jueza de Garantías N° 5, María Belén Chapresto, a pedido de la fiscal antidrogas María Eugenia Arechavala, en el marco de una investigación sobre delitos vinculados al tráfico de drogas a pequeña escala. La propiedad está ubicada en el Barrio 13 de diciembre de Resistencia, un punto crítico en la lucha contra el narcomenudeo. Las fuerzas de seguridad habían allanado y asegurado el lugar tras evidenciar su uso sistemático para la comercialización de sustancias prohibidas.
De acuerdo con el artículo 11 de la ley 2304-N, el inmueble se entregó provisionalmente a la Policía del Chaco para garantizar su preservación, evitar su reocupación por bandas criminales y darle un fin social hasta que se resuelva su destino definitivo en el proceso penal. Desde el fuero antidrogas destacaron que esta decisión marca un "punto de inflexión en la política judicial sobre bienes vinculados al narcomenudeo".
Esta acción se considera parte de una "estrategia integral de abordaje del problema del narcotráfico", que no solo incluye la persecución penal, sino también la recuperación de espacios tomados por el narcotráfico para devolverlos a la comunidad.