En diálogo con Radio Facundo Quiroga, la abogada Adriana Molina, querellante en la causa por el crimen de Leonela Giménez, fue contundente: “No fue un desenlace trágico. Esto fue un asesinato vil, cruento, horroroso, que no merecía como ser humano y como mujer”. La letrada recalcó que “trágico es cuando es por un accidente o algo fortuito. Esto fue algo con alevosía y una perversión inusitada”.
Molina confirmó que el hecho fue recaratulado como femicidio: “Hoy se les va a hacer conocer a estas personas la imputación y los hechos, y es femicidio o feminicidio, que hay una pequeña diferencia. Obviamente que es un femicidio”. Además, reveló que la investigación avanza con nuevos allanamientos: “Desde las 7 de la mañana se están llevando a cabo procedimientos en los domicilios de los detenidos y habrá otros en lugares que no puedo adelantar”.
Respecto de la evidencia, la abogada señaló que “gracias a las cámaras se fueron descubriendo muchas cosas”, y añadió: “Hay un cartucho encontrado en el bolsillo de la ropa de uno de los detenidos que sería coincidente con el orificio hallado en el cuerpo de Leonela”. Subrayó también: “Mi compromiso como mujer, madre y profesional del derecho es encontrar a quienes asesinaron vilmente a Leonela y que sean castigados con la condena más dura que prevé nuestro Código Penal: la perpetua”.
Sobre la vida de la joven, destacó: “Leonela era una joven con proyectos, madre de dos hijos. No era una desconocida para las personas que están detenidas. Mantenía un vínculo de amistad con ellos”. Y recordó un detalle conmovedor: “Su mamá me contó que era muy friolenta y usaba medias gruesas. Esas medias se encontraron en una garita, pero no las tenía puestas cuando fue hallada”.
Finalmente, Molina explicó que aún no se conoce el móvil: “No creo que lo hayan planeado. Era un vínculo aparentemente normal. Hay diferentes hipótesis que me reservo. Pero el crimen perfecto no existe y se va a saber”. También aseguró estar en contacto con la oficina de violencia de género de Resistencia para colaborar en el caso: “Estoy a disposición para aportar todo lo que sea necesario”.
