Rocío Barbona, referente de ASPACH (Amigos Solidarios de Personas con Parkinson Chaco), relató en diálogo con Radio Facundo Quiroga el crecimiento de la organización y el trabajo que realizan para visibilizar la enfermedad, acompañar a quienes la padecen y reclamar una atención médica efectiva. “Nuestro objetivo es convocar a la gente que salga del encierro, y ahora tenemos una gran puerta para llegar más lejos”, expresó.
Barbona advirtió que el mayor problema actual es el acceso al diagnóstico y tratamiento en el interior de la provincia. “Te encontrás con cada realidad que asusta. Fuimos a Tres Isletas y se nos acercó una persona con estudios preguntando si tenía Parkinson, porque nunca lo vio un neurólogo”, reveló. Además, afirmó que “en el interior no llega el neurólogo” y eso impide tanto la medicación como el seguimiento necesario.
“ASPACH golpea puertas, ASPACH hace ruido”, enfatizó, y cuestionó la falta de respuestas desde el sistema público de salud. “Hay gente con Parkinson que no tiene pensión y las consultas están por encima de los $50 mil”, explicó. Frente a este panorama, están gestionando atenciones solidarias con profesionales dispuestos a colaborar: “Salimos a buscar neurólogos con buena referencia y un costo accesible para que se sumen a esta movida”.
Actualmente, ASPACH nuclea a 114 personas de distintas localidades chaqueñas. “Hay muchas historias en esas personas. Lo más triste es que necesitamos una atención mensual porque nuestra medicación se tiene que ir regulando”, señaló y agregó: “Si no alcanzo con mi medicación, no soy atendida, y todo lo demás se desmorona”.
Finalmente, resaltó la importancia de la contención integral: “No es simplemente un resfrío, acá hay personas certificadas con CUD que no tienen la atención garantizada”. Y subrayó: “Podemos tener buena predisposición, pero lo que realmente es necesario es la atención médica y el seguimiento mes a mes, que es casi imposible”.





