Hugo Cantón, emprendedor deportivo de Formosa, denunció haber sido víctima de una estafa por casi 17 millones de pesos tras contratar la construcción de una cancha de pádel en la provincia del Chaco. El hecho ocurrió en junio de 2023 cuando, buscando desarrollar su complejo deportivo en Laguna Blanca, confió en un supuesto representante de una empresa especializada en instalaciones deportivas. “Caí en manos de una persona que se hizo pasar por gestor de canchas de pádel”, explicó en diálogo con Radio Facundo Quiroga.
Según relató, el contrato incluía la construcción de la cancha, el césped, la gradería y la posibilidad de techarla más adelante. Todo debía estar listo en 45 días. “Yo pagué el total en efectivo en julio del año pasado y hasta hoy no tengo respuesta. Pasaron meses y nunca me entregó nada. Perdí tiempo, dinero y oportunidades”, expresó. Tras insistentes reclamos y promesas incumplidas, en diciembre decidió iniciar acciones legales.
Cantón pudo contactarse con Javier Royero, verdadero dueño de la empresa que supuestamente iba a ejecutar la obra, quien le confirmó que el estafador nunca fue empleado formal ni remitió dinero alguno. “Él sabía cómo se trabajaba, pero nunca llevó mi contrato a la empresa. Yo confié porque era alguien de la zona y quise darle una oportunidad a un local”, lamentó.
El empresario explicó que la estafa no solo le provocó un daño económico sino también emocional. “Era mi ilusión tener el primer complejo de pádel sobre la ruta 86, era algo nuevo para la zona. Hoy otros ya se instalaron y yo solo quiero recuperar algo para volver a intentarlo”, dijo. Además, criticó que el acusado sigue moviéndose con impunidad: “Anda por la calle como si nada. Así como caí yo, pueden caer otros”.
Actualmente, el caso se encuentra en instancia de mediación y la audiencia fue fijada para el próximo 22 de mayo. Cantón espera que haya una resolución judicial favorable, aunque no descarta avanzar por la vía penal si no se llega a un acuerdo. “Estoy asesorado legalmente. No es solo la plata, es la confianza que se pierde. Ahora cada vez que me acerque a alguien, lo voy a mirar de reojo”, concluyó.