Lanús venció 1-0 a Universidad de Chile en el Estadio Ciudad de Lanús-Néstor Díaz Pérez y, sumando el 2-2 de la ida, avanzó a la final de la Copa Sudamericana. Rodrigo Castillo fue la gran figura de la serie, ya que anotó los tres goles que le dieron el pase al Granate.
El partido comenzó intenso y a los 4 minutos se produjo la primera polémica con una fuerte plancha de Agustín Cardozo sobre Javier Altamirano. El árbitro Alexis Herrera sancionó con tarjeta amarilla y el VAR confirmó la decisión, manteniendo el juego bajo control pero dejando un aviso al infractor.
A los 11 minutos, Lanús estuvo cerca de abrir el marcador con un remate de Marcelino Moreno tras una asistencia de Eduardo Salvio, pero el gol fue anulado por un fuera de juego milimétrico. La Universidad de Chile respondió con un disparo de Felipe Salomoni desde mitad de cancha que pasó apenas por arriba del travesaño, mientras el trámite del partido se mantenía parejo hasta el entretiempo.
En la segunda mitad, Lanús tomó mayor protagonismo y a los 61 minutos Marcelino Moreno asistió a Rodrigo Castillo, quien definió con pierna zurda ante la salida del arquero para marcar el 1-0 definitivo. La acción fue revisada por el VAR ante un reclamo por posible mano, pero el tanto fue validado por el árbitro.
Con esta victoria, Lanús alcanzó su tercera final de la Copa Sudamericana, siendo el único representante argentino en la definición tras la eliminación de Racing en la Libertadores. El Granate se enfrentará al Atlético Mineiro, que superó a Independiente del Valle, y buscará su segundo título continental tras la consagración de 2013.
