A pocas horas de una jornada histórica, Laura Cardozo, vicepresidenta del Centro Social, Recreativo y Cultural para No Videntes y Amblíopes (CE.NO.VI.), habló con Radio Facundo Quiroga sobre los 50 años de la institución, su impacto social y el significado personal de este aniversario. “Yo perdí la vista hace 15 años y pensé que se terminó mi vida, y no, el Ce.No.Vi me demostró que puedo seguir haciendo las cosas de diferente manera, pero hacerlas”, expresó.
La celebración será este viernes 25 de julio y contará con un extenso cronograma que incluye desayuno, izamiento de bandera, acto central en el Salón Obligado de Casa de Gobierno y un almuerzo institucional. “Están llegando alrededor de 100 personas de nuestras filiales de Villa Ángela y Castelli. Vamos a inundar de ciegos la ciudad”, dijo con entusiasmo. “Hay que mostrar presencia. No podemos quedarnos de brazos cruzados esperando que nos hagan todo tampoco”, agregó.
Cardozo también se refirió a los desafíos diarios de las personas con discapacidad visual: “No tenemos otra manera de ver la vida, aunque suene gracioso. Pero no es imposible. Todo depende de nuestra actitud. Si vos no mostrás que existís, nadie te va a tener en cuenta”. Además, cuestionó el asistencialismo: “La sobreprotección es muy mala. Hay que tener paciencia, pero también dejar que uno haga su camino”.
Consultada por el uso de elementos como el bastón blanco o el perro guía, fue clara: “Si vos llevás tu bastón con dignidad, esto es lo que me tocó y esto es lo que a mí me ayuda. La gente siempre va a opinar de todo”. Y sobre los términos adecuados, reafirmó: “Somos ciegos. No videntes son todos, nadie adivina el futuro”.
Finalmente, celebró que “los ciegos decidimos tomar las riendas de nuestro Ce.No.Vi” y destacó el avance en la construcción de la Casa del Ciego. “La obra comenzó en 1991 y ahora se retomó. Para fin de año nos prometieron terminar la planta baja, donde funcionará la editora Braille, que hace más de 25 años accesibiliza material de estudio gratuitamente. No hay excusas: el que quiere, puede”, concluyó.





